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CONSERVACIÓN DE IMÁGENES RELIGIOSAS EN LAS IGLESIAS DE PARCA E IQUIUCA

Terremoto Iquique 2005

CONSERVACIÓN DE IMÁGENES RELIGIOSAS EN LAS IGLESIAS DE PARCA E IQUIUCA

Publicado el 30/08/2006
Con un equipo formado por 6 voluntarias, estudiantes y egresadas del área de la conservación, orientadas por tres integrantes del Laboratorio de Monumentos del CNCR, se realizó un programa de conservación en terreno de las imágenes religiosas de las Iglesias de Parca e Iquiuca. Ambos pueblos, ubicados en la I Región al interior de Iquique, sufrieron grandes daños en el terremoto de junio de 2005.

El trabajo de recuperación de la estructura de ambos templos lo lideró la Fundación Ayuda a la Iglesia que Sufre (AIS) con el financiamiento de la Minera Cerro Colorado. Dentro de este proyecto, se contactó al CNCR para que colaborase en la restauración de las imágenes igualmente dañadas. Con este fin a principios de año se realizó un diagnóstico de las obras, el cual tuvo como resultado un informe con las propuestas de conservación recomendadas. En base a éste, se convocó al equipo de conservadoras y estudiantes, las que trabajaron en terreno entre el 23 de julio y el 3 de agosto. Se realizaron trabajos de conservación y restauración a un total de 19 imágenes religiosas en culto activo, tanto de madera policromada como de yeso, pertenecientes a ambas iglesias. Con el fin de cumplir las metas previamente establecidas, se destinaron 4 días de trabajo para cada capilla, lo que posibilitó ejecutar un amplio rango de tratamientos, como el reencolado de piezas de madera o el secado de resanes. El poco tiempo disponible para llevar a cabo las tareas significó que las ocho jornadas de trabajo en terreno fuesen muy intensas trabajándose un promedio de diez horas diarias. Los tratamientos realizados se centraron en detener procesos de deterioro activo, devolver la estabilidad al soporte y recuperar el aspecto estético de las imágenes reintegrando faltantes de policromía, dedos perdidos, etc. La experiencia de trabajar con estudiantes del área en calidad de voluntarias fue exitosa y productiva, ya que además de permitir realizar las misiones a un costo razonable, se generó un proceso de aprendizaje que en otras circunstancias habría tomado varios meses.